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El veterinario explicó que los animales estaban bien, pero que no eran perros, sino en realidad zorros rojos. Dijo que los cachorros de zorro sí parecían cachorros cuando aún eran bebés. Mark compartió la noticia con sus compañeros y éstos no podían creer la impactante noticia. El veterinario les aconsejó que devolvieran a los bebés a tiempo, para que su madre pudiera encontrarlos.
Tentar la Suerte
El equipo sabía que el cuidado de una mamá sería lo mejor para estos niños. Así que devolvieron a estos animalitos y, por supuesto, los vigilaron de cerca desde lejos. Después de esperar varios días y noches, seguían sin ver a la madre zorro. Los bomberos sabían que debían actuar.
Avanzar
Esta vez, los bomberos llevaron a los zorritos a la Clínica de Animales de Woodland Park, famosa por ayudar y rehabilitar a animales de todas las formas y tamaños, así como por entrenarlos para vivir en la naturaleza. Los bomberos esperaban que estas crías crecieran aquí con la misma normalidad que en la naturaleza.
Ocurrencia común
Los bomberos se sorprendieron al encontrar crías de zorro en la ajetreada ciudad, pero en realidad, no es algo poco común. Con el rápido crecimiento suburbano, los zorros han estado luchando por su propio hábitat natural, y a veces aparecen en las ciudades.
Todavía no es el final
Esta historia de los zorros puede parecer divertida, pero también es muy educativa. Los bomberos han aprendido mucho de su experiencia reveladora. El equipo esperaba que con esta historia la gente aprendiera más sobre las criaturas salvajes para su propia seguridad y para ayudar a salvar más vidas